Las principales asociaciones pediátricas, asocian la exposición a los dispositivos electrónicos en edades tempranas con adicciones, inatención, disminución en el vocabulario, impulsividad, entre otras cosas (L’Ecuyer, 2018).


Uno de los problemas a los que nos enfrentamos en la escuela actualmente es la falta o periodos cortos de atención. La atención es una actitud de descubrimiento, una actitud de apertura ante la realidad, es la actitud activa del que formula preguntas, busca respuestas, está a la expectativa de lo que se encuentra sin ningún filtro ni prejuicios. Cuando un niño está frente a un televisor, tableta o dispositivo electrónico, el niño no está prestando atención, más bien, se encuentra fascinado, que a diferencia de la atención; la fascinación es una actitud pasiva ante estímulos novedosos, frecuentes e intermitentes, es la actitud de embotamiento. Por lo que se puede concluir, que estos dispositivos son altamente adictivos, ya que lo que ocurre ante la pantalla en esas edades tempranas en las que aún no se tienen cualidades desarrolladas como el autocontrol y el criterio, es fascinación, no es atención sostenida.

En el 2017, la Asociación Pediátrica Canadiense afirmó que no es recomendable que los niños de menos de dos años, estén en contacto con dichos dispositivos y que de los dos a los cinco años, lo ideal es menos de una hora al día, en el entendido, que el contenido deber ser adecuado a la edad del niño. Cabe mencionar, que éstas no son recomendaciones educativas, sino recomendaciones para la salud neurológica de nuestros hijos.

¿Usted lector se preguntará si es adecuado el uso de las tabletas en la edad preescolar? Hoy se sabe por los resultados de estudios relacionados con el tema, que el uso de los dispositivos tiene más inconvenientes que beneficios para esas edades. Si usted es un padre de familia que quiere reducir el tiempo que sus hijos le dedican a los dispositivos electrónicos, es importante que sepa que no se trata de prohibir por prohibir, sino de brindarles alternativas de relaciones interpersonales, por ejemplo: llevarlos al parque, preparar un postre, construir una nave espacial con trozos de cartón, en fin, cualquier actividad que permita la convivencia y que represente un reto para los niños.

A manera de conclusión, se presentan algunas de las recomendaciones de la Asociación de Pediatría Canadiense y de la Academia Americana de Pediatría con respecto al uso de medios digitales en edades tempranas:



Referencias:
L’Ecuyer, C. (2018). Las pantallas perjudican la atención de los niños. Video publicado por El País el 29/01/2018.   
L’Ecuyer, C. (2017). No te engañes, tu hijo no necesita una tableta. Artículo publicado por El País el 28/07/2017.